Desde Bryan, Texas, el alcalde Gutiérrez ha emitido una declaración firme en defensa del agua local, alertando sobre la amenaza que representan entidades foráneas que buscan explotar los acuíferos de la región con fines lucrativos. Según el alcalde, estas compañías privadas intentan extraer el recurso sin tomar en cuenta el futuro de la comunidad, una práctica que él califica como "piratería del agua". Gutiérrez advierte que el objetivo de estos inversionistas es obtener ganancias millonarias antes de que entren en vigor regulaciones, dejando a la población local con costos más altos, menos derechos sobre el agua y un futuro incierto. Subraya que estos actores externos no han desarrollado planes de conservación sostenibles, a diferencia de la ciudad, que ha trabajado en estrategias a largo plazo para proteger sus recursos hídricos. El alcalde también rechaza la idea de simplemente perforar pozos más profundos como solución, ya que esto aumenta los costos, complica el acceso al agua limpia y acelera la disminución de los niveles del acuífero. Reconoce que algunos propietarios creen tener derecho a vender el agua bajo sus tierras, pero enfatiza que se trata de un recurso compartido que afecta a toda la región. Finalmente, Gutiérrez llama a la reflexión colectiva y a la protección del acuífero por encima de intereses individuales, en beneficio de agricultores, ganaderos, pequeñas empresas y generaciones futuras.